Hay lugares que se disfrutan por la comida, otros por la música, algunos por las bebidas, pero Acento Soul Kitchen no se conforma con una sola categoría: es una mezcla de atmósferas, de técnicas, de personas. Es el tipo de espacio donde se cocina de frente, se habla sin presunciones y se marida la experiencia con personalidad. No se trata solo de gastronomía, sino de la manera en la que la comida, el trago, la luz y la conversación pueden hacer que una noche cualquiera se vuelva algo digno de recordar.
Ubicado en Querétaro, Acento se aleja de los clichés. Aquí no hay manteles largos ni posturas elevadas. Hay una cocina expuesta, una barra viva, una playlist que fluye como el servicio, y un equipo que entiende que lo verdaderamente sofisticado está en lo auténtico. El diseño cálido, de luz tenue y mesas cercanas, invita a que el comensal se sienta parte del espacio, no solo espectador. Y sí, puedes venir con tu pareja, con tus amigos, con tu familia o incluso solo; te van a recibir como en casa, con ese tipo de calidez que no se improvisa.
La propuesta culinaria del chef ejecutivo Daniel Cabrera mezcla técnicas tradicionales mexicanas con influencias asiáticas y diferentes técnicas. Cada plato tiene una narrativa: el bao de costilla ahumada, por ejemplo, es resultado de horas de ahumado, fermentaciones caseras y pan hecho en casa por el chef panadero.
A eso se suma el trabajo en barra, donde Jorge Basurto lleva la coctelería al siguiente nivel. No por extravagancia, sino por cuidado. Aquí los jugos son frescos, los ingredientes se respetan y cada cóctel puede tener un maridaje pensado para complementar la cocina. Y sí, hay espacio para lo clásico y también para la experimentación, siempre con ese sello de la casa que lo vuelve reconocible sin importar lo que pidas: coctelería clásica con el toque de Acento.
Pero quizás lo que realmente distingue a Acento es su gente; no solo por su talento, sino por la forma en que entienden su trabajo. Daniel lo dice claro: después de pasar por cocinas de vieja escuela, ahora apuesta por liderar con humanidad: el respeto y la empatía son parte del sazón y eso se siente. La vibe es relajada, pero nunca improvisada.
Acento busca ser la opción para complementar (o romper) tu rutina, un espacio donde puedes venir a cenar un martes, tomar un cóctel en jueves o disfrutar de las sorpresas de sus viernes “camaleónicos”. Porque eso es lo que quieren: que vuelvas no por costumbre, sino por el deseo de repetir una experiencia distinta.
En una ciudad cada vez más rica en propuestas gastronómicas, Acento no pretende gritar más fuerte. Prefiere hablar con voz propia y esa voz, cálida y firme, ya empieza a resonar con fuerza.
Y si te preguntas si esa experiencia se puede llevar a otro lugar, la respuesta es sí. A través de Evento Punto & Acento, la marca hermana del restaurante, el concepto se expande más allá de su ubicación física. Desde bodas íntimas hasta eventos corporativos, este proyecto transforma cualquier celebración en una experiencia con sello propio: ambientación cuidada, atmósferas memorables y un servicio de catering que lleva la sazón y el carácter de Acento Soul Kitchen a donde tú lo necesites. Porque la comida puede ser el alma de una celebración, y lo que pasa en la mesa, permanece en la memoria.