La temporada de Fórmula 1 comenzó con promesas y esperanzas para Checo Pérez, el piloto mexicano que parecía tener un lugar asegurado junto a su compañero de equipo, Max Verstappen. Con podios consecutivos en las primeras carreras, Pérez mostró un desempeño sólido, pero el Gran Premio de Miami marcaría el inicio de una racha de altibajos para el equipo Red Bull.
En Miami, Pérez terminó en cuarto lugar, mientras que Verstappen, lejos de su acostumbrada apariencia de campeón dominante, terminó por ocupar un modesto segundo lugar. La competencia se intensificaba con la aparición de Lando Norris de McLaren y un resurgido equipo Ferrari, plantándose de cara a cara con Red Bull.
La siguiente carrera, en Emilia Romagna, confirmó las dificultades de Pérez. El mexicano perdió la tercera posición en el campeonato de pilotos a manos de Charles Leclerc, tras una segunda carrera consecutiva fuera del podio. Apenas logró avanzar desde el puesto 11, terminando en un octavo lugar gracias a una estrategia con neumáticos duros.
El punto más bajo llegó en Mónaco, donde Red Bull vivió su peor fin de semana de la temporada. Un accidente dejó a Checo fuera de la carrera, mientras que Verstappen luchaba por mantenerse en un discreto sexto lugar. La percepción de que Red Bull ya no imponía el mismo “miedo” comenzó a cobrar fuerza, y las dudas sobre la continuidad de Pérez en el equipo se hacían más grandes.
Pese a estos altibajos, Checo Pérez sigue siendo un piloto valioso. Subcampeón de pilotos en 2023, ha contado con el apoyo de patrocinadores importantes como Carlos Slim hijo, quien ha respaldado su carrera desde 2005. El patrocinio ha sido constante y significativo, llevándolo a competir en Europa y marcando 18 años de colaboración ininterrumpida.
La renovación de su contrato con Red Bull promete ser un jugoso beneficio para sus patrocinadores, pero las prioridades parecen estar por caminos separados. Mientras que Pérez busca estabilidad y continuidad en un equipo competitivo, Red Bull busca evaluar su rendimiento de manera anual, incluso dejando la puerta abierta a posibles nuevos pilotos en el futuro.
Las negociaciones siguen en curso, y algunas fuentes indican que el anuncio de la renovación podría llegar antes del próximo Gran Premio de Canadá. La espera está llena de esperanza para los fanáticos, quienes desean que Checo Pérez continúe su carrera en Red Bull y siga demostrando su valía en la Fórmula 1.