La Ensalada Niçoise es un plato icónico de la cocina francesa, sobre todo de la región de Provenza-Alpes-Costa Azul. Representa a la perfección la esencia de la mediterránea francesa: ingredientes frescos, sabores vibrantes y una preparación sencilla pero cuidada.
Así pues, aquí te presentamos una clásica receta de la ensalada niçoise, además de unos cuantos secretos para lograr su mejor versión.
Origen y tradición
Nació en Niza, en francés, Nice, de ahí Niçoise, y de ahí que también se le conozca como ensalada nizarda. Originalmente era una ensalada sin lechuga ni papas, pues algunos puristas de la receta consideran estos ingredientes como añadidos modernos.
Una receta que se inspira en la cocina de mercado, usando lo que estaba disponible: tomates, aceitunas, anchoas y huevos.
Prepara una ensalada Niçoise perfecta
Estos son ingredientes para la “versión auténtica“, y algunos ingredientes son opcionales, como la lechuga, papas, maíz y zanahoria.
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Tomates: Maduros y jugosos, cortados en gajos.
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Huevos duros: Cocidos perfectamente (yema cremosa, no seca).
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Aceitunas de Niza: Pequeñas, negras y ligeramente amargas (si no encuentras, aceitunas negras comunes).
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Anchoas: En salazón o en aceite de oliva (dan un toque umami).
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Atún: Tradicionalmente se usaba atún fresco (sellado en la sartén), pero el atún en lata en aceite es más accesible.
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Judías verdes: Cocidas al dente y refrescadas en agua helada.
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Aliño: Aceite de oliva, vinagre de vino tinto, mostaza de Dijon, ajo, sal y pimienta.
Sigue estas técnicas
Para lograr una cocción perfecta de los huevos, tienen que estar de 9 a 10 minutos en agua hirviendo, luego choque térmico en agua fría para evitar que se sigan cocinando y el “anillo gris”.
Hacemos lo mismo con las judías verdes; las cocemos de 2 a 3 minutos y enfriamos en hielo para mantener el color y textura. Para finalizar, la ensalada niçoise no se mezcla, se monta en capas y se presenta en porciones separadas para realzar cada ingrediente.
Una vez que tienes todo listo, sírvela en un palto amplio, con ingredientes ordenados; adereza en el último momento para que los vegetales no se ablanden. Puedes acompañar con una baguette y un rosé de Provenza.