El mindfulness es la práctica zen de estar presente en el aquí y el ahora, un estilo de vida al que se ha recurrido para escapar del estrés y encontrar paz. Este pensamiento invita a ser más conscientes de los detalles cotidianos, agradecer cada momento para vivirlo plenamente y llevar la meditación a cada aspecto del día a día.
Para muchos, el maestro zen Thich Nhat Hanh fue el responsable de traer el pensamiento mindfulness a la cultura occidental. Martin Luther King Jr. lo nominó para premio Nobel de la Paz en 1967 por oponerse a la guerra de Vietnam. Por esta postura fue exiliado 39 años, época en la que se convirtió en refugiado político de Francia. El maestro budista falleció el pasado 22 de enero en el templo Tu Hieu en Hue, Vietnam.
Por medio de la escritura de más de múltiples libros, conferencias y retiros, Thich Nhat Hanh enseñó palabras de paz alrededor del mundo. Enseñó Religión Comparada en la Universidad de Princeton y dio conferencias en muchos otros recintos y universidades.
Algunas de las ideas de Thich Nhat Hanh pueden ser incorporadas en nuestro día a día para vivir una vida más plena y consciente. Aquí te presentamos algunas:
Caminar conscientemente
Así como hay personas que meditan sentados en el suelo, propone una práctica meditativa mientras caminas. En sus palabras, “Camina como si estuvieras besando la Tierra con tus pies”. Dar cada paso reflexivamente, con tranquilidad, en oposición al apuro que caracteriza a las calles transitadas, es una manera de calmar la mente y vivir el presente.
El amor profundo y universal
Dentro del pensamiento budista, la interrelación de los seres vivos enriquece el significado del amor. Al amar a otra persona, amamos también la vida misma y a nosotros siendo parte de ellas. En uno de sus libros lo describió así: “Por medio de mi amor por ti quiero expresar mi amor por todo el cosmos, por toda la humanidad y por todos los seres”.
Meditar al realizar actividades cotidianas
Así como se puede hacer meditación al caminar, se puede practicar en distintos momentos del día, al respirar profundamente y estar completamente presente en cada momento. Esto se consigue al establecer un puente entre la mente y el cuerpo, que suelen actuar en planos separados (con el cuerpo haces una cosa y con la mente estás atendiendo tus preocupaciones, por ejemplo).
La importancia de la presencia
El mindfulness es una práctica que puede ayudarnos a relacionarnos mejor con las personas. Thich Nhat Hanh asegura que estar completamente presentes para nuestros seres queridos es también amar desde la meditación. Esto implica entrar en un estado de conexión entre la mente y el cuerpo (siendo conscientes de nuestra respiración) para estar atentos a las palabras del otro y tratar de comprenderlo plenamente.
La compasión
Uno de sus libros más populares El arte de cuidar a tu niño interior, plantea que dentro de todos nosotros hay un niño herido. En lugar de tratarnos a nosotros mismos y a los demás como adultos iracundos, podemos tratar de tenernos compasión pensando en las heridas que cargamos desde la infancia. Hacernos cargo de nuestro niño interior es atender el dolor que hemos sufrido e invitar a esa mirada infantil para asombrarnos del mundo.
Para profundizar en estos temas, te recomendamos leer El verdadero amor, El arte de caminar, El arte de cuidar a tu niño interior.