El Hoh Rain Forest, situado dentro del Parque Nacional Olímpico, en el territorio del estado Washington, es una de las ejemplificaciones de los ecosistemas de bosque templado húmedo más espectaculares de los Estados Unidos de América. Este ecosistema proporciona una vasta extensión a lo largo del río Hoh y atesora una inmensa vegetación.
Un lugar que vale la pena visitar si estás de visita en el país de las barras y las estrellas.
Allá, los árboles más grandes, el abeto de Sitka y la tsuga del Pacífico, alcanzan alturas de hasta 95 metros. De hecho, este bosque pluvial recibe entre 360 y 420 centímetros de lluvia al año, lo que explica la exuberancia de la vida existente en el mismo.
El clima Hoh Rain Forest
El clima del Hoh es el de un bosque pluvial, con veranos relativamente secos en comparación con el resto del año. También, el clima del Hoh se caracteriza por la existencia de inundaciones estacionales que modelan el paisaje (por ejemplo, cambios de cauce de los ríos y erosiones de las orillas de estos) y han permitido que una rica biodiversidad prospere, incorporando a los alces de Roosevelt, a los osos negros y a aves como el búho manchado del norte.
Una de las rutas que puede ser recorrido es el Hall of Mosses, que es uno de los senderos por excelencia del Hoh y que permite al visitante seguir una ruta mágica a través de un paisaje cubierto de musgo. En el Hoh, los árboles parecen figuras mitológicas. Este sendero breve ofrece al visitante la íntima oportunidad de descubrir una flora y fauna de características propias.
Importancia ecológica y conservación
El Hoh Rain Forest no es solo bello, también es importante desde un punto de vista ecológico, debido a que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, así como Reserva de Biosfera, lo que permite expresar la importancia ecológica que tiene a nivel global. Su valor global consiste en la permanencia del ecosistema para futuras generaciones.
El Hoh Rain Forest es accesible mediante la Upper Hoh Road que serpentea junto al río Hoh. Se ofrecen numerosas opciones para hacer caminatas y acampar a partir de los senderos bien cuidados, lo que favorece la posibilidad de disfrutar de esta increíble zona natural.
La combinación de paisajes espectaculares y diversidad junto a con las posibilidades recreativas lo convierten en un destino ineludible para quienes busquen experimentar la naturaleza del noroeste del Pacífico.