Hace 25 años, “Los Soprano” se estrenaba en la TV, marcando una revolución en la historia de la televisión. Antes de su aparición, no existía nada similar; significó que la televisión también podía emplear un lenguaje cinematográfico, algo que antes era exclusivo del cine.
La revolución de “Los Soprano”
¿Qué hace tan especial y querida a esta serie? Bueno, existen varios motivos, el primero de ellos es que trasladó el lenguaje cinematográfico a la televisión, pues antes de su estreno la mayoría de las series, aunque contaban una historia lineal, sus episodios eran auto conclusivos, resolviendo el conflicto en un mismo episodio.
Además, abundaban las sitcoms (comedia de situación); con una estética cruda, violencia y sexo; “Los Soprano” introdujo a un “antihéroe” en el papel protagónico. Va más allá de ser una historia de la mafia, pues sus personajes sucumben ante las complejidades de la vida, el poder, la moralidad y la búsqueda de un significado en un mundo caótico.
La mafia en el colectivo
Hasta antes de los 70 “mafia” y “Cosa Nostra” no existían, o bueno, eran un secreto para la sociedad norteamericana, algunos arrestos y juicios más tarde la “mafia” era lo del momento, Mario Puzo inmortalizó el nombre de una familia en un libro “El Padrino”.
Para la adaptación de la película se escogió a un italoamericano, el director Francis Ford Coppola, a la producción se sumó Joe Colombo, el jefe de la Familia Colombo, una de las Cinco Familias de la Ciudad de Nueva York. Colombo también era un activista que estaba decidido a proteger la imagen de los migrantes italianos en el país.
Intervino en la producción de “El Padrino”, se eliminó toda referencia a la Mafia y la “Cosa Nostra”, además, hizo que mafiosos reales actuaran como extras en la película.
“Los Corleone” dominaron el siglo XX, pero no fue hasta el 10 de enero de 1999 que David Chase desafió la obra de Coppola. Una nueva familia, con un apellido distinto, transformaría la percepción de la mafia italoamericana en Estados Unidos: Los Soprano.
El legado de “Los Soprano”
A lo largo de 86 episodios Los Soprano introdujo nuevos temas recurrentes en las historias de la mafia, humanizó a sus personajes y los mostró vulnerables, arcos narrativos que se extendían a lo largo de toda la temporada.
James Gandolfini, encarnando a Tony Soprano, popularizó el arquetipo del “antihéroe” en la televisión, dejando una huella imborrable en el panteón de los personajes más entrañables y memorables de la pantalla chica.
La serie concluyó en 2007 y al año siguiente, en 2008, se estrenó “Breaking Bad”. Después del fallecimiento de Gandolfini, Vince Gilligan, creador de “Breaking Bad”, afirmó: “Sin Tony Soprano, no existiría Walter White”.
Lost, Mad Men, Breaking Bad, House of Cards, Peaky Blinders y muchas otras, literalmente decenas de series han intentado replicar la fórmula de Los Soprano; la influencia de esta serie sigue siendo evidente hasta el día de hoy.