La tarde del viernes, Roberto Aguire se conectó con Dapper Magazine desde su hogar, listo para compartir anécdotas, reflexiones y esa chispa que lo ha convertido en uno de los actores más versátiles de su generación. Con una calidez que desarma, Aguirre recordó sus inicios, habló de sus retos y celebró el poder del cine mexicano. Esta es la conversación que tuvimos.
El Niño que Encontró su Vocación en una Boda
Todo comenzó en una fiesta familiar. “Me acuerdo que en la boda de una prima había un escenario… yo me subí y empecé a bailar. Pasaba una canción, luego otra, y la gente se reía. Estaba feliz haciendo el payaso, hasta que la novia tuvo que bajarme”, confiesa entre risas. Esa necesidad de conectar con el público, de crear momentos de catarsis o risa, lo acompañó desde entonces. “Me volví adicto a eso de muy chiquito”.
La importancia de un buen guion
Para Aguirre, la elección de proyectos siempre comienza con la historia. “Con un guión fuerte, podemos crear mucho más. Si el guión tiene hoyos, se vuelve muy difícil construir encima”. Este criterio lo llevó de Boulevard (2014), donde compartió pantalla con Robin Williams, a la franquicia de Mirreyes vs Godínez, donde encuentra alegría y desafío por igual.
Drama vs. Comedia: Dos Caras de una Misma Moneda
“Cada género tiene sus retos y sus regalos”, reflexiona. Para Boulevard, perdió 15 kilos y se sumergió en un personaje “roto y vulnerable”. Trabajar con Williams fue “un regalo enorme… un genio de nuestra época”. En contraste, la comedia en Mirreyes vs Godínez le exige evolucionar personajes que el público ya ama. “Ya somos como una familia… improvisamos libremente porque nos conocemos”.
Mirreyes vs Godínez: Un Proyecto con Ambición Global
Haber filmado en Las Vegas fue un sueño logístico y artístico. “Llevar una producción mexicana al Caesars Palace… habla de la calidad y ambición del cine que se hace en México”. Para Aguirre, este proyecto simboliza un mensaje de unión y fortaleza colectiva que trasciende fronteras.
El Actor como Creador Multifacético
Aguirre no se limita a actuar. Escribe, produce y aspira a dirigir. “Es una evolución natural del artista… hoy los actores tenemos que ser personas que pueden escribir, dirigir y producir”. Rechaza la idea del “actor puro” y abraza el cambio: “Hay que encontrarle la parte que nos enriquece”.
El Sueño de la Fantasía Épica
Autoproclamado “ñoño”, Aguirre confiesa su amor por El Señor de los Anillos, Game of Thrones y Dune. “Me encantaría ser parte de un proyecto de fantasía o ciencia ficción… esa personita dentro de mí se sentiría muy feliz”. Sueña con aportar su talento a universos que transporten al público a otros mundos.
Un Mensaje de Gratitud al Público
Al finalizar, Aguirre quiso destacar el papel del arte en la sociedad. “En la Segunda Guerra Mundial, lo único que no cerró en Inglaterra fueron los teatros”. Agradece al público mexicano por apoyar historias que “nos mueven algo o nos sacan de nuestras vidas por un rato”. “Me siento muy agradecido de ser parte de esta industria”.
Roberto Aguirre es mucho más que un actor: es un narrador incansable, un defensor de las historias bien contadas y un soñador que cree en el poder del cine para unirnos. Desde Dapper Magazine, agradecemos su tiempo y su sinceridad, y esperamos verlo pronto en ese proyecto de fantasía que tanto anhela.
