Seguramente conoces a alguien que no desayuna o se salta algunas comidas. Ya sea debido a su estilo de vida acelerado, su intención de bajar de peso o… mera desorganización. ¿Sabías que, de acuerdo con el equipo de médicos y nutricionistas del Grupo NC Salud 1 , no desayunar reduce el rendimiento y la concentración y – también – nos podría llevar a comer más alimentos durante el resto de día? Se trata de un momento clave para todas nuestras actividades, pues esa primera comida en el día nos brinda energía para nuestra masa muscular, mantener activo nuestro metabolismo, mejorar rendimiento y concentración.
Considerando lo anterior y la versatilidad que nos ofrece, es importante recordar un aliado en el desayuno para toda la familia: el cereal que, no solo es una buena opción para el desayuno, sino para cualquier momento en el día. Su versatilidad provoca que se haya ganado un lugar privilegiado en la alimentación humana, pues no tiene igual.
Platicamos con Elisa Gómez, gerente de Nutrición y Wellbeing para Kellogg Latinoamérica, quien nos compartió tres maneras distintas para integrar el cereal en nuestra vida diaria a la hora de desayunar, botanear o cenar de manera fortificante, nutritiva y deliciosa…
Si tú, como nosotros, eres amante del cereal pero no sabes cómo combinarlo… ¡estas recetas son para ti!
Lunch vegetariano
Esto podría ser una alternativa compuesta por elementos muy variados y exquisitos. ¿Qué incluye? ½ taza de edamames, una ensalada griega (aceitunas, jitomate, lechuga y queso feta), ½ taza de cereal y una taza de fresas. En caso de que desees convertir el platillo por uno totalmente “plant-based” puedes sustituir el queso de la ensalada por cuadritos de tofu.
Cena ligera
¿Buscas una selección que te deje satisfecho y que te permita dormir en paz? Aquí la solución: un plato de cereal, una fruta de temporada (por ejemplo, puedes encontrar en estos meses fresa o plátano) y leche o yogurt. Adicionalmente, puedes añadir alguna cobertura de cacahuate, semillas de girasol o nuez picada. Sin duda, una cena ligera para cerrar tu día.
Opción práctica
Ya sea para desayunar o cenar, la propuesta anterior puedes combinarla de otra manera para consumir tan sólo 245 calorías: ½ taza de cereal, un plato de papaya y una taza de leche descremada. Esta última puede ser sustituida, por ejemplo, por yogurt natural o del sabor que prefieras.
¿Apoco no se te hace agua la boca? Además, resulta ideal conocer que una opción tan deliciosa es igualmente nutritiva. Los cereales, en este caso, Corn Flakes de Kellogg’s® están enriquecidos con vitamina D, B1, B6, B12, ácido fólico y hierro. Incluso, una porción de este cereal aporta el 50 % de la ingesta diaria recomendada de vitamina D. Igualmente, está hecha de granos de maíz 100 % de origen natural y es libre de aromas y colorantes artificiales.
Acuérdate de este cómplice la próxima ocasión que no sepas qué desayunar o degustar entre comidas. Puedes atreverte a explorar maneras nuevas de integrarlo a tus comidas y descubrir cómo puede ser el mejor acompañamiento para los momentos salados o dulces.
¡No dejes ir a tu aliado ideal frente a los momentos de hambre!
