Hoy recordamos lo que fue una de las épocas más felices de nuestras vidas, donde todo era más sencillo y nuestra única preocupación era no tener el juguete nuevo que había salido al mercado. Una etapa donde seguramente comiste dulces hasta el cansancio y jugaste hasta con las piedras.
Aquí una recopilación de cosas que seguro te recordarán esos bonitos momentos:
Hielocos
Nos es casi imposible describir la obsesión de todos por reunir la mayor cantidad posible de estas figuras. Un clásico de clásicos.
Pepsilindros
No te veías tan cool si te faltaba un pepsilindro en la mano. Seguro ahora usas termos y demás recipientes para transportar líquidos, pero en estas épocas, no había otra opción más que estos populares botes (si querías robar más de un suspiro).
Pizarrón mágico
Un básico para los más creativos, en el cual podías dibujar y dibujar por horas, borrando una y otra vez.
Chipileta
El sabor era increíble pero la sensación que generaba en el paladar cosa de otro mundo. Lo peor era cuando se te caía el polvito.
View Master
Seguro pasabas horas subiendo y bajando la palanca para cambiar de imagen. Entre más discos tenías, mejor era la experiencia.
Juego de agua
Horas y horas intentando meter losa ritos en las agujas.
Burbusoda
Efervescente, ácido y muuuuuuuuy adictivo.
Tazos
Las escenas de batallas de tazos se quedaron grabadas en nuestra mente para siempre. Conseguir ese tazo que le faltaba a tu colección, era lo más increíble del planeta.
Nintendo 64
Una de las consolas más queridas en todo el mundo y más si tenías algún juego de Mario Bros en tu colección.
Aldea navideña Coca Cola
Un tesoro para todas las familias mexicanas que consumen esta marca de refresco. Adorno básico navideño de la cultura mexicana.
Caja sonrics
La emoción por descubrir el regalo sorpresa que traía cada casa era adrenalina pura. Los dulces aunque eran poquitos, los amábamos.