Es tradición: todos los años, es entre los meses de marzo y mayo que muchas parejas realizan sus bodas. Pensando en esto, presentamos cinco destinos de lujo para una luna de miel de ensueño. Cada propuesta está pensada para un perfil de pareja distinto: desde aventuras en la sabana africana hasta el relax mediterráneo, pasando por escenarios románticos exóticos, experiencias culturales y el máximo lujo exclusivo. Cinco hoteles extraordinarios – La Maison Favart, Son Bunyola, Kasbah Tamadot, Finch Hattons y La Lancha – ofrecen diferenciales y vivencias irrepetibles para quienes buscan comenzar su historia de casados con magia y sofisticación.
Para las parejas aventureras: safari de lujo en Kenia
En pleno Parque Nacional Tsavo de Kenia, el más grande y antiguo del país, Finch Hattons Luxury Safari Camp combina la emoción de la vida salvaje con el glamour de un lodge cinco estrellas. Sus 17 suites elevadas en tiendas de campaña de estilo victoriano ofrecen vistas directas a manantiales naturales frecuentados por elefantes, búfalos, hipopótamos y leones. Al amanecer y al atardecer, las parejas exploran la sabana en safaris guiados, avistando fauna majestuosa en un paisaje dominado por las colinas Chyulu y la silueta del monte Kilimanjaro en el horizonte. Por las noches, el lujo continúa: cenas a la luz de las velas junto a la piscina infinita o en la terraza de la suite, bajo un cielo africano pintado de estrellas. Esta experiencia exclusiva permite a los aventureros vivir la magia de África con total comodidad, sin renunciar a ningún detalle de bienestar.

Para quienes buscan relax absoluto: serenidad mediterránea en Mallorca
En la idílica costa noroeste de Mallorca, escondido entre la Sierra de Tramuntana, se extiende el histórico Son Bunyola Estate, un oasis de 810 acres de paisajes vírgenes con viñedos, pinares, cítricos y olivares, y tres kilómetros de costa mediterránea sin tocar. En el corazón de esta finca del siglo XVI transformada en hotel de cinco estrellas, las parejas encuentran privacidad y calma totales. Despertar con vistas a las montañas (Patrimonio Mundial) y al mar, practicar yoga al aire libre al amanecer y disfrutar de un masaje en pareja con productos naturales de la isla son parte de la rutina aquí. La piscina rodeada de terrazas históricas invita a refrescarse bajo el sol mallorquín, mientras que paseos entre almendros en flor o una cata de vinos locales al atardecer completan la experiencia sensorial. Son Bunyola ofrece un lujo sereno y discreto donde el tiempo parece detenerse, ideal para novios que anhelan bienestar, naturaleza e intimidad.

Para los románticos: encanto selvático de película
En las selvas exuberantes del Petén guatemalteco, frente a las aguas esmeralda del lago Petén Itzá, se esconde La Lancha, un íntimo refugio boutique de sólo diez casitas decoradas con arte y mobiliario guatemalteco seleccionados por la familia Coppola. Su atmósfera es de ensueño: las parejas pueden mecerse en una hamaca en la terraza de su casita, rodeados del canto de las aves tropicales, mientras el sol tiñe de oro la superficie del lago al atardecer. A poca distancia aguarda Tikal, epicentro de la civilización maya, con más de 3.000 antiguas estructuras escondidas entre la jungla que invitan a aventuras compartidas. Tras explorar templos milenarios durante el día, los enamorados regresan a la tranquilidad de La Lancha para una cena íntima en la palapa principal, con vistas al lago iluminado por la luna. Con su mezcla de ambiente relajado y misterio histórico, este destino resulta perfecto para una luna de miel romántica fuera de lo común, donde la naturaleza y la historia se conjugan para crear recuerdos imborrables.

Para los amantes del arte, la cultura y la historia: París de la Belle Époque
En el corazón de París, a pasos de la Opéra Comique, La Maison Favart recibe a sus huéspedes con el encanto de una mansión del siglo XVIII. Este refinado hotel boutique de 39 habitaciones rinde homenaje a la historia de amor entre Charles-Simon Favart, director de la Opéra Comique, y la actriz Justine Duronceray, cuya legendaria pasión artística aún impregna cada rincón. Al cruzar el umbral, la decoración de época transporta a los recién casados al París de antaño: butacas de terciopelo, espejos dorados, retratos teatrales y lámparas de araña que evocan la elegancia de la Belle Époque. La joya del hotel es La Petite Maison Favart, una suite dúplex de 75 m² que fue el apartamento privado de los Favart y que ofrece vistas directas al teatro de la Ópera. La Maison Favart es un escenario íntimo donde el arte, la música y la historia envuelven la luna de miel con la magia única de París.

Para quienes buscan experiencias en un destino exótico: Palacio bereber en el Atlas
En las estribaciones de las montañas del Atlas, a una hora de Marrakech, Kasbah Tamadot se alza como un retiro “de mil y una noches” privado y galardonado, propiedad de Sir Richard Branson. Su nombre significa “suave brisa” en bereber, apropiado para la paz que se respira en este oasis. El hotel dispone de 42 habitaciones de ensueño, desde suites palaciegas decoradas con artesanía marroquí hasta extravagantes tiendas bereberes con jacuzzi y nuevos riads de tres dormitorios con piscina y terraza privadas. Rodeada de jardines perfumados y patios con fuentes, cada pareja disfruta de atenciones a medida: pueden relajarse en el hammam tradicional del spa o brindar con champagne en la piscina infinita con vistas al monte Toubkal, el pico más alto de Norte de África. Para los recién casados que desean una luna de miel al máximo nivel de sofisticación, Kasbah Tamadot promete sorprender y deleitar a cada paso.
